Autores: Brisa Terezón en colaboración con Diego Chicas, ASAUDB

A lo largo del año, observamos destellos de “estrellas” que se cruzan por el firmamento, que comúnmente se conocen como estrellas fugaces. Hay épocas en las que, con más frecuencia es factible observarlas y en mayor cantidad, siempre que las condiciones climáticas lo permitan. Para el mes de noviembre la lluvia de meteoros las “Leónidas” ofrecen la oportunidad de disfrutar de este gran espectáculo a simple vista.

Cuando se observa una lluvia de meteoros, las estelas brillantes pueden aparecer en cualquier lugar del cielo, pero todas las «colas» parecen señalar al mismo sitio en el cielo. Esto se debe a que todos los meteoros se acercan a nosotros en el mismo ángulo, y a medida que se acercan a la Tierra, el efecto de la perspectiva hace que parezcan más lejanos. A este lugar de donde parece salir los meteoros, se conoce como radiante.

Figura 1. Perspectiva de las estrellas provenientes del mismo sitio Créditos Imagen: NASA

La lluvia de meteoros las “Leónidas”, fue observada en 1833 por Denison Olmsted, un físico y astrónomo estadounidense. Sus observaciones durante más de seis horas, le permitieron concluir que los trazos provenían de la constelación de Leo. Desde entonces se adopta este nombre, por tener su radiante en dicha constelación. Las Leónidas, son restos del cometa Tempel-Tuttle, que tarda 33 años en completar una vuelta alrededor del Sol.

Figura 2. Los rastros de las estrellas rayan esta imagen del cometa Tempel-Tuttle tomada por Tim Puckett el 26 de Enero de 1998.

¿Cuándo podremos observarlas?

Este año será una buena ocasión para observar las Leónidas. Aunque se trata de una lluvia de estrellas de carácter irregular, el IGN (Instituto Geográfico Nacional de España) asegura en su web que pueden ser tan espectaculares como las perseidas. Estos meteoros alcanzarán su máxima intensidad la noche del 16 de noviembre y la madrugada del 17 de noviembre, una jornada que contará con buenas condiciones lunares (solo emitirá el 7,2% de su luz), según el organismo especializado.

Figura 3. Mapa de cielo generado en Stellarium , donde se muestra la dirección en la que se observa la constelación de Leo. Créditos Imagen/OMM.

Algo importante que mencionar es que la mayoría de lluvia de meteoros pueden ser observados a simple vista, para ello debemos tener consideraciones importantes, como, por ejemplo, la contaminación lumínica, la luna (llena), buenas condiciones atmosféricas (noche despejada, sin nubosidad).